Las carillas Lumineers son una marca registrada y se fabrican con porcelana Cerinate por el Laboratorio Cerinate™ en California.

La diferencia principal es que las carillas Lumineers son mucho más delgadas que las normales, con un grosor en torno a 0’3 mm. por lo tanto no es necesario tallar el diente como se hacía hasta ahora.

Por lo tanto tampoco es necesario pinchar anestesia y los dientes originales quedan intactos haciendo que este proceso sea totalmente reversible.

Se colocan en tan solo 2 visitas. Primero se realizará una revisión, un diagnóstico y una planificación. Se tomarán las fotos, medidas y muestras de color (no requieren anestesia).

Antes de la colocación, si es necesario, se realizará una limpieza y un blanqueamiento previo, ya que las carillas son tan finas que son translúcidas. Finalmente se colocarán las carillas sobre las piezas dentales naturales. RECUERDA SOLO SE COLOCAN EN CENTROS DENTALES CERTIFICADOS.

– No es necesario tallar los dientes (reducir su contorno), a diferencia de las carillas tradicionales.

– Se colocan sin anestesia, totalmente indoloras.

– Blanqueamiento instantáneo y duradero.

– Extraordinariamente resistentes, duran más de 20 años.

– Son totalmente reversibles ya que se preservan las piezas dentales originales.

En cierto modo, al bajar un par de tonos el color de los dientes estamos consiguiendo un aspecto rejuvenecido de nuestra dentadura.

Los dientes con el paso de los años tienden a oscurecerse o amarillearse. Gracias a un blanqueamiento profesional conseguiremos devolver a las piezas dentales un aspecto más juvenil sin deteriorar el esmalte ni alterar su funcionalidad.

Con un blanqueamiento profesional además conseguiremos eliminar la mayoría de la manchas producidas por distintas causas: café, té, vino, tabaco, medicación, etc.

En todo caso, hay determinadas manchas que no se podrán eliminar con este procedimiento; en estos casos deberemos utilizar la técnica de las carillas.

Hay varios procedimientos para conseguir bajar tonos en la coloración de los dientes.

En general todos parten de la misma idea: con una sencilla reacción química conseguir que el oxígeno penetre en el esmalte produciendo un efecto de blanqueamiento.

Para ello utilizaremos peróxido de hidrógeno o peróxido de carbamida. En nuestra unidad, potenciaremos el efecto de estos agentes químicos con el uso de luces LED que mejorarán y harán más intensos los resultados minimizando efectos secundarios como la sensibilidad dentaria.

Se completará con tratamiento en casa para aumentar su eficacia.

Aunque se comercializan infinidad de tratamientos caseros para el blanqueamiento dental lo cierto es que, con diferencia, los más efectivos son los que se pueden realizar en la consulta del especialista.

Hay que tener cuidado con los procedimientos caseros pues muchos pueden provocar la abrasión paulatina de los dientes, la pérdida del esmalte y la dentina.

Estos procedimientos a medio plazo pueden provocar efectos notables sobre la salud buco-dental, ademas de lesiones en las mucosas y/o en la encía.

Evidentemente no es una técnica que modifique la forma de los dientes, por otra parte no producirá efecto sobre partes restauradas de la boca (coronas o empastes) que deberán ser modificadas tras el tratamiento.

En dientes teñidos por tetraciclinas conseguiremos aclarar el tono del diente.

Es importante que quienes se apliquen un tratamiento de blanqueamiento dental tengan una boca libre de caries y con las encías saneadas.